Chriss Pratt llegó a pesar cerca de 136 kilos antes de dar un cambio radical a su estilo de vida.
Fue a causa de un comentario acerca de su peso, que recibió cuando se presentó para un rol en una película, lo que lo llevó a perder 46 kilos y pesar los 90 que hoy mantiene.
Pratt reveló que tenía una vida muy sedentaria y las largas horas en un set de grabación lo incitaban a comer cerca de 4 hamburguesas. “Tenía 31 años, estaba fatigado y emocionalmente deprimido. Tenía serios problemas de salud que me estaban afectando”, comentó en una entrevista.
Entre las cosas que decidió cambiar fue dejar la cerveza y comenzar una exhaustiva rutina de ejercicios de tres horas diarias.
¿Qué rutina seguía?
- 10 minutos de cardio
- Tres series de 15 repeticiones de sentadillas
- Tres series de 10 repeticiones de flexiones
- Seis series de 20 repeticiones de tren superior, remos y bíceps con barra y mancuerna.
- Para los pectorales solía entrenar una vez por semana siguiendo cuatro series de 12 repeticiones de peso tumbado, 4 series con 12 repeticiones de banco de pesas y cuatro series de 10 repeticiones de levantamiento de peso con cables cruzados.
- Para las piernas realizaba sentadillas, peso muerto, press de pierna, paso profundo con pesas, extensión de piernas y pesas de piernas. Mientras que para los hombros seguía rutinas de brazos flexionados, brazos hacia arriba, brazos hacia abajo, levantamiento lateral con pesas. Finalmente, para marcar los abdominales, practicaba planchas, abdominales con levantamiento de pierna.
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