Ahora todo tiene sentido.
Las personas siempre al inicio de una relación amorosa buscan cuidar su físico, pero todo desaparece cuando ya hay confianza, por lo mismo comienzan a descuidarse y suben de peso.
Así lo dice un estudio de la Universidad Metodista del Sur de Dallas, que las parejas felices tienden a subir de peso de manera más rápida que las que tienen problemas.
Según el estudio las parejas felices suben de peso, porque de manera inconsciente están seguras que lo importante es la personalidad y no el físico. Esto aplica a las mujeres casadas que engordan más rápido que las solteras, porque saben que su esposo no las dejará.
Otro dato que lanzó el análisis es que las parejas estables prefieren quedarse en casa en lugar de salir a hacer una actividad física.
Con información de: NoSeasMaje
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