Bastó una prueba de ADN para determinar la naturaleza de las especies halladas en diferentes lugares del mundo.
Afirman algunos medios locales que el cuerpo de un chupacabras fue hallado despellejado. Cola larga, colmillos grandes, aseguran que es la criatura que ha aterrorizado en algunas poblados.
Para los escépticos, no existe tal aberración, es el cuerpo de un felino putrefacto. El chupacabras no existe.
¿Un mito? Benjamin Radford, del Comité para la Investigación Escéptica, de Estados Unidos, decidió ir más allá de las crónicas coloridas de pobladores, fue al centro de la leyenda, para poder determinar con bases si la aterradora criatura bÃpeda, con colmillos sobresalientes, ojos grandes, púas en el lomo y garras afiladas es una realidad.
Se remontó a Puerto Rico. La investigación lo llevó a Madeylen Tolentino, en Canóvanas, quien en 1995, según BBC Mundo, aseguró “ver” al chupacabras, “el ser terrorÃfico, parecido a un extraterrestre, que pasó frente a la ventana de su casa” y apenas alcanzaba el metro y medio de altura.
Lo responsabilizaban de la muerte de ganado, al que le extraÃa toda la sangre, dejando dos orificios en el cuello. La sucesión de hechos con las mismas caracterÃsticas acrecentó la fama del chupacabras.
Pronto el tema se viralizó, la historia contagió a habitantes de México, del sudoeste de Estados Unidos e incluso China.
La que era una criatura bÃpeda se transformó en una animal cuadrúpedo. Para Loren Coleman, director del Museo Internacional de CriptozoologÃa de Portland, la explicación se encuentra en un error de traducción.
Mientras que para Radford, todo proviene de la cinta Species, (1995) dirigida por Roger Donaldson.
"En la pelÃcula, la actriz Natasha Henstridge tenÃa pinchos en la espalda, como los de las primeras descripciones de chupacabras en 1995”, precisó Coleman a National Geographic.
Hasta antes de tener referencia sobre algunos especÃmenes hallados muertos, al que se afirmaba, eran chupacabras, todo hacÃa suponer que se trataba de perros, coyotes y los más osados llegaron a ligarlos a extraterrestres, con el padecimiento sarna sarcóptica causada por ácaros.
Radford se trasladó a Texas, donde se encontraron cerca de 12 ejemplares. Encontró cuerpos “sin pelos y con la piel aparentemente quemada”.
Se les sometió a pruebas de ADN, lo que tiró por la borda la teorÃa del chupacabras. Los cuerpos pertenecÃan a “perros, coyotes o mapaches, e incluso uno era un pescado”.
¿Y la falta de sangre que presentaban las vÃctimas? "Cuando el animal muere, el corazón deja de latir y no hay presión sanguÃnea... La sangre se filtra hacia la parte más baja del cuerpo, donde se coagula y se espesa. Es lo que se conoce como lividez y da la impresión de que al cuerpo le han extraÃdo toda la sangre", explicó Radford a BBC Mundo.
Por lo mismo, concluye que el chupacabras “es el primer monstruo del Internet. Si los primeros reportes de su existencia se hubiesen producido en 1985, algunas personas se habrÃan enterado, pero no se habrÃa extendido por todo el mundo"
Con información de: Lifestyle.americaeconomia