Los has convertido en alimentos habituales en tu dieta diaria, pensando que son muy saludables y que te ayudan a mantener la línea. Pero hay ciertos alimentos que debes evitar -o al menos reducir su consumo- porque no son tan sanos como pensabas, y es que estabas equivocado.
Suelen ser alimentos saludables en su versión original, pero que tras haber sido procesados, han perdido por el camino sus propiedades y beneficios iniciales. Además, han ganado aditivos y azúcares añadidos que hacen que contengan más calorías y engorden más. Conclusión: evita la comida procesada y envasada y aliméntate de la forma más natural posible.
1. Alimentos light
Compras alimentos light pensando que te ayudarán a perder peso, y aunque es cierto que contienen menos grasas que su versión original, los alimentos bajos en calorías o cero por ciento en materia grasa no contienen menos azúcares. Esto quiere decir que los alimentos light no son tan sanos como pensabas. Además, para que sigan conservando su sabor, tienen numerosos aditivos y colorantes que no son nada saludables para el organismo.
2. Pan blanco
El pan blanco o pan de sándwich, y en general todos los alimentos ricos en carbohidratos simples no son para nada sanos. Este tipo de alimentos suelen hacerse con harinas refinadas y procesadas que pierden gran parte de los nutrientes de los cereales, así como la fibra, esencial para sentirse saciado, por lo que acaban dando más hambre. Pero no solo pierden parte de sus beneficios para el cuerpo, sino que además, contienen numerosos azúcares añadidos y edulcorantes y conservantes, y suelen haber estado congelados.
3. Margarina
¿Margarina o mantequilla? Lo primero que piensas es que la margarina es mucho más saludable que la mantequilla porque contiene menos grasas saturadas y menos calorías, pero lo cierto es que la margarina contiene grasas trans que aumentan los niveles de colesterol malo en sangre a la vez que disminuyen los del bueno.
4. Yogur de sabores
Con el yogur ocurre lo mismo que con el resto de alimentos y comidas procesadas. Cuanto menos natural, menos sano. Si al yogur natural se le añaden edulcorantes, colorantes y sabores y aditivos artificiales, se acaban estropeando las propiedades y beneficios del yogur natural y se sustituyen por azúcares que convierten a un alimento en principio sano, en un alimento procesado con muchos aditivos que no son recomendables para la salud.
5. Zumos envasados
El caso de los zumos es exactamente igual al caso del yogur. Si compras un zumo de frutas envasado y lees la etiqueta con la información nutricional, te darás cuenta de que el porcentaje de fruta natural que contiene es mínimo, y que los aditivos y los azúcares añadidos para evitar la oxidación de la fruta han hecho que una bebida que parece sana, no lo sea. Por eso es mejor que seas tú quien prepare tus zumos o smoothies naturales de frutas y verduras
Fuente: Biotrendis