Si alguna vez te suscribiste a un boletín informativo del que luego no pudiste darte de baja, probablemente hayas sido víctima de uno de los trucos que usan algunas compañías en la web para "atrapar" a los usuarios y obligarlos a hacer cosas que no desean.
Si no que se lo cuenten a los usuarios de Microsoft, que recientemente obligaron al gigante informático a revisar su política tras mostrar su indignación por un "truco sucio".
Generalmente, dicen los expertos, son trampas que se realizan al diseñar la interfaz de la web, que incluye contenidos como menús, ventanas, gráficos y otros elementos que en teoría deberían ayudar al usuario a interactuar mejor con la computadora, pero que muchas veces son cuidadosamente creados para forzarlo a hacer cosas involuntarias.
En un último recuento según BBC Mundo estos son los trucos más habituales
1. La suscripción de la que no te puedes dar de baja
El diseño engañoso de algunas interfaces puede llevar al usuario a la desesperación.
Este truco será familiar para cualquiera que se haya suscrito felizmente a un boletín informativo (newsletter) o a un servicio y luego haya encontrado que es extremadamente difícil darse de baja.
Generalmente, la interfaz de la web es diseñado de manera que se le hace facilísimo al usuario que se meta en una situación pero extremadamente difícil salirse de ella.
¿Quién no ha hecho clic en ese maravilloso enlace llamado "cancelar suscripción" para descubrir que sigue recibiendo el boletín que no le interesa?
Y eso en los casos que encuentre el enlace, ya que muchas veces está escondido bajo la letra pequeña y los anuncios publicitarios. Para muchos, acaba siendo más fácil borrar cada mensaje indeseado que llega.
2. El 'Zucking'
El nombre tiene su origen en el nombre del fundador de Facebook, Mark Zuckerberg.
Se refiere a la práctica de "crear deliberadamente una confusa jerga e interfaces de usuario que engañan a los usuarios para que compartan más información acerca de sí mismos de lo que realmente quieren", asegura Tim Jones, de la Electronic Frontier Foundation, una ONG estadounidense que defiende los derechos de los individuos en internet.
"Hacer que compartas tus datos personales en una página web resulta muchísimo más fácil que protegerlos".
Afortunadamente, al menos en el caso de Facebook, esta empresa ha recibido elogios por haber mejorado su política de privacidad y corregir esta práctica.
3. Preguntas capciosas
Este truco consiste en presentar opciones confusas al usuario, cuando se le pide que marque casillas para comprar productos u opte por recibir o no material de marketing.
Las compañías presentan alternativas deliberadamente inconsistentes para que la gente cometa errores, advierten los expertos.
Por ejemplo, cuando compras un billete algunas aerolíneas de bajo costo dan varias opciones ordenadas de manera engañosa para confundir al usuario para que contrate un servicio sin darse cuenta (por ejemplo, un seguro de salud).
Afortunadamente, como los costos son agregados a la cesa de compra, el usuario los puede eliminar antes de pagar.
4. ¿A o B?
Algunas opciones confusas en las web pueden deberse a que sus creadores están experimentando con varias opciones.
Muchas empresas tecnológicas llevan a cabo lo que se conoce como pruebas A o B, en las que ensayan diferentes diseños en un sitio web en vivo, al mismo tiempo, para ver qué genera mejores resultados.
Esto también puede ser motivo de confusión para el usuario.
Fue confirmado recientemente por Google, que experimento simultáneamente con los enlaces de sus páginas de resultados en negro y azul para ver si se aumentaba el número de clics (finalmente se quedó con el azul).
Durante su época como ejecutiva de Google, Marissa Meyer realizó ensayos con 41 tonalidades de azul para ver cuáles eran más atractivas para los usuarios.
Fuente: BBC Mundo