Aumentó más de 9 kilos y luce irreconocible, todo para personificar la vida de una patinadora artística.
Margot Robbie ha sufrido un cambio radical en su cuerpo, para darle rienda suelta a su nuevo personaje, basado en la vida real de una patinadora artística llamada Tonya Harding.
La glamorosa actriz australiana, de 26 años, fue fotografiada en el set de filmación de I, Tonya el pasado lunes, luciendo idéntica a la atleta en los 90s, con unos jeans tiro alto y un sweater de esos enormes.
Su cabello ondulado fue el toque perfecto para copiar la apariencia de Tonya, además de llevar unas prótesis en su rostro que copiaban los rasgos de la patinadora. Según reveló, tuvo que subir 9 kilos en orden de personificarla.
La película planea seguir de cerca uno de los momentos atléticos más escandalosos de Estados Unidos, en donde el ex marido de Harding contrató a un hombre para que lastime a Kerrigan, otra patinadora que competía, en las Winter Olympics de 1994. A pesar de ello, Kerrigan se llevó la medalla de plata, y Harding obtuvo el octavo puesto.
Se estrenará en el 2018, pero ya han comenzado con las grabaciones y Robbie, una vez más, se lleva las miradas por su impresionante look.
Con información de: TKM