Parece que no todo es diversión en la mansión Playboy. Holly Madison, una ex playmate y protagonista del programa “Girls at the Playboy Mansion” ha dado de qué hablar esta semana al revelar los escándalos y abusos que se vivían en la residencia.
“Down the Rabbit Hole: Curious Adventures and Cautionary Tales of a Former Playboy Bunny” es el título del libro que acaba de ser publicado y en el que se muestran los polémicos detalles de la vida de Hugh Hefner y los verdaderos requisitos que se necesitan para pertenecer a Playboy.
Holly Madison relata que se le pedía que tuviera relaciones con Hugh Hefner, una “rutina” que ella y las demás integrantes de la casa odiaban, a pesar de que en ese entonces se suponía que sólo Tina Jordan, la novia del empresario, podía tener relaciones con él. Sin embargo, era ella quien las llevaba de manera individual a su cuarto.
“Mi turno con Hugh Hefner terminaba tan rápido como empezaba”, escribe Holly sobre las orgías en las que participaba con otras mujeres y para las que eran obligadas a lavarse los pies antes de subirse a la cama. Detalló que las demás pretendían tener relaciones enfrente del magnate y en ocasiones sólo simulaban que se tocaban, además de que esperaban ansiosas la llegada de nuevas playmates para poder así evitar el tocar al empresario.
La primera vez que conoció a Hugh, relata Holly, él le ofreció drogas, aunque admite que no las probó y que él no insistió. Cuando sí sufrió abuso emocional fue cuando se negaba a utilizar lipstick rojo o cortarse el pelo.
Aunque se hacían alianzas entre las habitantes de la casa, la ex playmate se dio cuenta que el dueño de la revista Playboy era un manipulador que gustaba de hacerlas pelear entre ellas. “No le tengo ninguna lealtad a Hef”, escribe ella. “No le he hablado en cuatro años, así que no hay razón para contactarlo. Aparte, es la verdad”.
Cuando Holly se hartó de los abusos que soportaba en la mansión y decidió irse, el empresario decidió chantajearla emocionalmente al ponerla en su testamento para convencerla de no hacerlo. Hugh le ofreció 3 millones de dólares al morir a cambio de quedarse, pero ella decidió declinarlo e irse para siempre.
Kendra Wilkinson, otra de las ex integrantes de la mansión y que protagonizó junto con Holly el programa de Playboy, defendió a Hugh de las acusaciones de su ex compañera, agregando que actuaba como la primera dama del lugar. ¿Cómo podía (Holly) querer hijos y casarse y luego decir estas cosas sobre Hef? Es sólo venganza y me siento mal por Hef. ¿Pero sabes qué? Es un ser humano extraordinario”.
Eran tantos los abusos y las presiones que se vivían en la casa, que Holly narra que pensó en suicidarse. Las reglas eran estrictas y ni siquiera se les permitía tener novio, aunque nadie la respetaba y además se consumía cocaína en los baños, a pesar de que esto también era prohibido.
Hefner respondió a las acusaciones de Holly a Us Weekly: “Muchos se han ido de aquí a vivir nuevas vidas felices, saludables y a ser productivos, estoy encantado de seguir en contacto con ellos. Lamentablemente hay otros que han intentado reescribir la historia en un intento por estar en el centro de atención”.
Fuente: NIUS MEDIA
