Si usted se acerca a una tienda o navega en internet con el fin de comprar un televisor nuevo, el mercado estará lleno en su gran mayoría por los smart (inteligente). Aunque los tradicionales permanecen, con HD y Full HD, y algunas marcas le siguen apostando a su fabricación, la tendencia que empezó hace pocos años es ofrecer en estos dispositivos distintas funcionalidades que el usuario pueda aprovechar para entretenerse.
Entre las ventajas de tener uno de estos televisores está, principalmente, reunir en el mismo equipo calidad de imagen y conectividad.
La calidad de imagen, que fácilmente podría ser como tener un cine en casa, es gracias a desarrollos de tecnología como la Ultra High Definition (UHD) o 4k e innovaciones como las pantallas curvas.
Ahora hay televisores smart con pantallas Oled —en las que se visualizan mejor los colores—, 4k y curvos que hacen que la experiencia del usuario con el dispositivo sea más inmersiva.
En un smart TV se debe buscar que “la tecnología sea de punta, con los últimos parámetros de definición porque es un mercado que evoluciona rápidamente y el dispositivo tiene que estar preparado para poder ingresar a internet y a las aplicaciones que ofrezca”.
Los smart TV contienen cientos de aplicaciones sobre deportes, películas, series o novelas, revistas, juegos y entretenimiento para toda la familia. La mayoría de ellas son gratuitas y de fácil descarga.
No se quede solo con las más conocidas, descargue otras y aproveche funciones como el comando de voz, que algunos smart incorporan para hacer más fácil la navegación en el televisor. Si quiere tener la experiencia smart por primera vez, recuerde que debe buscar uno que cuente con un procesador que haga su desempeño más eficiente. “Entre más núcleos tenga, hay mayor poder para el TV, estos le dan capacidad de procesamiento”.
Fuente: NIUS MEDIA